RESPUESTA COMENTADA DE LAS OPCIONES ANTERIORES:

1- Este paciente, de manera prioritaria, debe dejar de fumar ya que esta medida es la más coste - efectiva de cuantas podemos implementar en atención primaria para reducir el riesgo cardiovascular. Se ha demostrado que, para el cambio de hábitos, ya sea alimenticios, de ejercicio físico o en el de fumar, son efectivos los consejos realizados en atención primaria cuando se emplea la teoría de los estadios o etapas del cambio, es decir se indican a los pacientes especialmente motivados. Según resultado del test de Fargestrom, en principio se le podría indicar apoyo con sustitutivos de nicotina, pero no con antidepresivos como el bupropión por el consumo de citalopram.

2- Las actividades de prevención del riesgo coronario en este paciente incluyen, como ya hemos comentado, en primer lugar el cambio de hábitos: por un lado con el objetivo de alcanzar y mantener el peso ideal lo cual debería conseguirse con una dieta hipocalórica y la realización de ejercicio físico de manera regular. La dieta hipocalórica que se le proporciona es una estándar de 1400 calorías moderadamente pobre en grasas y en sal, que se ajusta a la dieta mediterránea. Para seguirla es imprescindible contar con la colaboración de su hija Elena que es la cocinera. Aunque pueda parecer más difícil hay estudios de cohortes que demuestran como se pueden cambiar los hábitos y reducir la morbilidad y mortalidad cardiovascular en ancianos.

3 - El consumo de alcohol en la prevención de la enfermedad cardiovascular es controvertido, parece que consumos bajos (menos de 24 g al día) se asocian a menor riesgo coronario y de ictus isquémicos. No obstante el consumo de alcohol eleva la presión arterial y se puede asociar a otros trastornos como ictus hemorrágico, arritmias cardiacas o coagulopatías. En nuestro paciente por lo tanto no se le puede recomendar que mantenga el consumo de alcohol que declara.

4- Las actividades de prevención del riesgo cardiovascular en este paciente incluyen el cambio de hábitos, por ejemplo realizar ejercicio físico. Debemos recomendarle la realización de ejercicio aeróbico adaptado a su edad que podría ser andar deprisa, natación o gimnasia de mantenimiento, más de 30 minutos y más de 3 días por semana, con una intensidad capaz de mantener las pulsaciones entre el 60 y el 85% de la frecuencia cardiaca máxima teórica (220-edad). Es recomendable que incorpore más actividad habitual a la rutina diaria como subir escaleras o seguir haciendo trabajos caseros o de jardinería.

5-Los factores estresante ambientales se han relacionado con mayor morbilidad cardiovascular, pero es muy difícil evaluar sus efectos concretos y la efectividad de las intervenciones en este sentido no está en absoluto establecida. Los pacientes socialmente aislados tienen mayor riesgo global de muerte, no solo por enfermedad cardiovascular. El soporte social y emocional supone un factor pronóstico importante en el paciente postinfartado, pero aunque hay algún estudio ha demostrado el beneficio de la intervención mediante apoyo social en la prevención secundaria cardiovascular, no los hay similares en prevención primaria.

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