SI ES NECESARIA LA DERIVACIÓN
A OTROS ESPECIALISTA
El diagnóstico de la pericarditis aguda es clínico
y, en los casos no complicados, el tratamiento es sencillo
y la evolución satisfactoria, por lo que no suelen
ser necesarias la realización de otras pruebas
complementarias ni la valoración por parte de
otros especialistas en ausencia de datos de afectación
miocárdica; no obstante, el paciente sí
ha de ser remitido de forma urgente al hospital para
la realización de una ecocardiografía
si existe sospecha de derrame pericárdico, datos
clínicos de taponamiento cardiaco o alteraciones
analíticas que sugiera la afectación del
miocardio. La pericarditis aguda puede tener diferentes
etiologías (imagen 11), aunque la viral es la
más habitual en pacientes jóvenes; solo
en casos de evolución tórpida debe ser
remitida al cardiólogo para un diagnóstico
etiológico específico.